Es innegable que Level-5 es una desarrolladora con uno de los mejores y más extensos currículums de la industria de los videojuegos, situándose casi como un sello de garantía para los títulos que esta lanza al mercado. A sus espaldas tiene algunos de los juegos más exitosos de las consolas en las que estos han sido publicados, y eso lo pueden afirmar pocas.
Para los que todavía no se sitúen, Level-5 es el estudio detrás de juegos como Rogue Galaxy y Dragon Quest VIII, de la archiconocida PlayStation 2; y otros más recientes como son Ni no Kuni, Fantasy Life y las franquicias El Profesor Layton e Inazuma Eleven, además de la propia franquicia del título que hoy nos corresponde analizar: Yo-kai Watch.
El juego que hoy analizamos fue lanzado hace 3 años en Japón, pero su repercusión ha sido tal que a día de hoy se ha convertido en todo un fenómeno social; y los japoneses pueden disfrutar de 7 juegos, su propio manga, una serie anime y su línea de juguetes, estos tres últimos que llegarán a nuestro país en las próximas semanas, tal y como os contamos en nuestro artículo ’10 cosas que debes saber sobre Yo-kai Watch’.
¿Conoces Yo-kai Watch para Nintendo 3DS? Tanto si tu respuesta es negativa como afirmativa, te invito a que me acompañes a través de las siguientes líneas y descubras por qué este juego está entre los mejores del catálogo de la portátil de Nintendo.
Dándonos a elegir el género del personaje al inicio del juego, Yo-kai Watch cuenta la historia de un chico (o chica) al que sus amigos le retan a cazar insectos raros para las tareas veraniegas del colegio. Es entonces cuanto nuestro protagonista decide adentrarse en el Monte Arboleda con la intención cumplir el desafío, pero en lugar de conseguir bichos raros se encuentra con una máquina de gashapones (las típicas bolas de plástico con regalos sorpresa en su interior) que, a través de una misteriosa e insistente voz, le pide introducir una moneda, a lo que este accederá.
La sorpresa del gashapon no será nada convencional, ya que en su interior se encontrará Whisper, un Yo-kai que, a modo de agradecimiento por liberarle, se convertirá en nuestro mayordomo. Es aquí cuando la historia no hace más que comenzar, pues desde este momento, y gracias al Yo-kai Watch que nos regala Whisper, nuestro protagonista podrá ver e interactuar con los demás Yo-kai que están repartidos por el mundo.
En el folclore japonés los Yo-kai son espíritus que se pasean a sus anchas por el mundo humano y, en una mayoría de ocasiones, haciendo trastadas a los vivos. Nuestra tarea será liberar a Floridablanca, la ciudad del juego, de todas las presencias malvadas; y para ello tendremos que hacernos amigos de Yo-kai afables que nos ayuden a combatir a los Yo-kai hostiles que se opongan a dejar de hacer el mal.
Más allá de la historia principal, conforme exploremos la ciudad nos encontraremos con misiones secundarias dividas en dos grupos: tareas y misiones, que nos introducirán a su vez en pequeñas subtramas. Algunas de estas se basarán simplemente en ayudar a personas que están sufriendo las gamberradas de un Yo-kai malvado, o que, por el contrario, necesitan la ayuda de uno; mientras que otras nos harán recopilar una serie de objetos y entregarlos a la persona que nos los ha pedido.
Al completarlas obtendremos experiencia extra para nuestros Yo-kai, objetos, dinero y, además, se nos premiará con la visualización de unas pequeñas secuencias de vídeo que, normalmente, tienen un tono bastante cómico. Lo bueno es que, en lugar de situarse como labores pesadas y aburridas de hacer; se hacen amenas, aumentan las horas del título y nos permiten progresar en el juego al aumentar el nivel de nuestro equipo Yo-kai.
A nivel jugable, la mecánica es bastante amplia y tiene muchísimas características que aportan riqueza al título sin abandonar un diseño de usabilidad bastante sencillo y un proceso de aprendizaje muy rápido.
Para movernos por la ciudad utilizamos el joystick de la consola, y al pulsar el botón B podemos correr, pero no de manera infinita. Al contrario que en otros juegos, el protagonista se cansa al correr y para hacérnoslo saber, cuando corremos, aparece junto a él un pequeño círculo lleno de “quesitos” que nos indica la resistencia que nos queda. Tras agotarnos, o simplemente al dejar de correr, tras unos pocos segundos se recargará el indicador y podremos volver a correr sin necesidad de tener que quedarnos parados, ya que se nos permitirá seguir andando mientras se recarga.
También tendremos la posibilidad de girar la cámara al pulsar los gatillos L/R y así ver el escenario desde distintos ángulos, aunque en la práctica no es una funcionalidad a la que le demos demasiado uso; y para guiarnos podremos usar la pantalla táctil, donde aparecerá un mapa de la ciudad con los objetivos, misiones y otros puntos de interés para nuestra aventura.
Por su parte, el Yo-kai Watch tiene una funcionalidad que podemos activar para que, cuando nos movamos por la ciudad, un radar nos avise al acercarnos a un Yo-kai. Una vez se ponga en rojo el medidor, si pulsamos A entramos en el Modo Lente. En este modo tendremos que mover una lente para posicionarla encima del Yo-kai invisible durante un tiempo determinado, pues así conseguiremos que este se haga visible, y así poder interactuar con él. Para mover la lente podremos usar la pantalla táctil de la consola o el joystick, aunque este último resulta más complicado e impreciso, puesto que una vez posicionemos la lente sobre el Yo-kai en cuestión, este se moverá y tendremos que seguirle con la lente hasta que consigamos rellenar el medidor.
Y es aquí donde entra uno de los apartados más destacados e innovadores del juego: el combate. Yo-kai Watch es un JRPG en tiempo real donde los Yo-kai atacan automáticamente. Esto quiere decir que, a diferencia de juegos como Pokémon, nosotros no seleccionaremos los ataques, pero en su defecto controlaremos una serie de opciones que aparecerán en la pantalla táctil durante el desarrollo del enfrentamiento.
Nuestro equipo está compuesto por un máximo de 6 Yo-kai, de los cuales combaten los 3 que están situados en la mitad superior de una ruleta que nosotros podemos girar en tiempo real para desplazar de sitio a nuestros Yo-kai, y que puedan entrar en combate los demás. Gracias a esto, por ejemplo, podremos mandar a la retaguardia a los Yo-kai que tengan pocos Puntos de Vida, y así evitar que los debiliten.
En esta situación hipotética que os planteo, si quisiéramos restaurarles vida o mejorar estadísticas como la velocidad o el ataque, podríamos hacer uso de la opción Objetos. Al seleccionarla veríamos los objetos que tenemos y podríamos usar el que queramos en nuestros Yo-kai o, incluso, en los enemigos.
Con Animáximum, una vez tenemos relleno el animámetro del Yo-kai y aparece el mensaje “¡Listo!” sobre este, podremos usar el ataque especial y único de cada Yo-kai. Como curiosidad, cada ataque, para darle más peso e importancia, contará con su propia animación y nombre.
Una vez seleccionemos Animáximum y el Yo-kai, para ejecutar este ataque tendremos que realizar una de las tres mini-actividades aleatorias que nos aparecerán en la pantalla táctil. Estas son: pulsar sobre unas esferas antes de que salgan de la pantalla, dibujar símbolos en la pantalla táctil siguiente las formas y, finalmente, hacer círculos en la pantalla táctil.
Además de debilitarse, los Yo-kai también pueden entrar en otros dos estados: vaguear (dejan de atacar durante un rato) y espiritación. En el segundo caso, y por culpa de algún Yo-kai rival, tendremos que usar la opción Purificar para devolverlo al estado normal. Al completar la purificación, a modo de recompensa especial, ganaremos puntos de experiencia extra.
Al igual que pasa en el Animáximum, para usar la Purificación también tendremos que realizar una determinada acción que, en el caso de esta opción, será una de las dos siguientes: romper la capa de maldad tocando repetidas veces la pantalla táctil o pulsar sobre todas las esferas de maldad que tienen espiritado a nuestro Yo-kai.
Y, finalmente, con Objetivo podremos hacer que todos nuestros Yo-kai ataquen a un Yo-kai enemigo concreto, haciendo que este se debilite más rápidamente al concentrar todos los ataques en él.
La mecánica jugable de los combates, incluso siendo bastante curiosa e innovadora, es cierto que podría haberse ampliado más, especialmente cuando se trata de las respectivas formas de ejecutar el Animáximum y la Purificación, puesto que no existen muchas acciones diferentes, y estas tampoco se complican más en función del avance el juego.
En resumidas cuentas, la estrategia de los combates consiste en saber controlar bien los recursos, saber cuándo hacer nuestros ataques especiales (Animáximum) y saber en qué momento tenemos que girar la ruleta para poner en el frente a unos u otros Yo-kai, puesto que si hay varios Yo-kai del mismo tipo en el frente, se potenciarán algunas de las características de estos en función del tipo en cuestión.
A primera vista puede parecer que estemos ante juego que olvida las estadísticas para centrarse en un gameplay más directo y alejado de los números; pero la realidad es que estas estadísticas existen y se pueden consultar en la información de cada uno de nuestros Yo-kai, donde aparecerán todas estas (salud, velocidad, defensa, ataque…), su tipo, su actitud, las habilidades (pasivas, ataques normales y Animáximum), objeto equipado… etcétera.
Tras el combate, y una vez derrotemos a los Yo-kai enemigos, estos nos darán experiencia para todo nuestro equipo, dinero y, dependiendo del Yo-kai, podremos obtener también un determinado objeto o que este mismo Yo-kai en cuestión pida unirse a nuestro equipo. En cuanto a esto último, hay que destacar que, pese a ser un tanto aleatorio, podemos aumentar las posibilidades de que ocurra si durante el combate le damos comida que le gusta (sin olvidar que cada Yo-kai tiene gustos distintos en cuanto a comida).
Cuando entablamos amistad con algún Yo-kai, este nos dará su medalla, la cual almacenaremos en nuestro Medálium Yo-kai. En total hay más de 200 Yo-kai divididos en 8 tribus (Valientes, Escurridizos, Misteriosos, Amables, Oscuros, Robustos, Guapos y Siniestros), y el factor de coleccionismo es uno de los más importantes del juego, por lo que esto nos derivará en horas y horas de juego, y post-juego, si queremos hacernos con todos.
Por supuesto, hay Yo-kai con los que es mucho más difícil entablar amistad, como son los Yo-kai legendarios y los Yo-kai shiny/especiales (con colores, habilidades y ataques distintos); y todos ellos son fundamentales si queremos completar el Medálium al 100%.
También, a medida que avancemos en el juego, tendremos que mejorar nuestro Yo-kai Watch para aumentar su rango y así poder acceder a zonas restringidas a estos rangos más altos, que será donde podamos encontrar a Yo-kai más fuertes. Los rangos van desde E a S, siendo E el más bajo y S es más alto.

Este es Pelochnyan, el Yo-kai resultante de la fusión entre Jibanyan y Rebelcebú. ¡Qué macarra!
Otras maneras de completar el medálium, y además potenciar nuestro Yo-kai, serán las evoluciones y fusiones Yo-kai, la primera de ellas al más puro estilo Pokémon. Ya sea con un objeto u otro Yo-kai, podremos fusionar algunos Yo-kai gracias al Sr. Zen del Templo Shoten. El resultado de las fusiones, además de dar lugar a Yo-kai más poderosos, también podrá derivar en Yo-kai legendarios; aunque hay que comentar que, al contrario que en la serie de televisión, el proceso de fusión no se puede revertir en el juego.
En esta misión de completar el Medálium Yo-kai también tendremos la ayuda del modo Cámara Yo-kai, donde cada día se nos ofrecerá un reto. Básicamente, deberemos hacer fotos con la cámara de la consola y, en cada foto que hagamos, aparecerá un Yo-kai. Si en la foto aparece un Yo-kai que no habíamos visto en el juego, este se nos añade al Medálium (como visto), haciendo así mucho más fácil el poder entablar amistad con él.
La clave está en buscar la foto que nos dé el Yo-kai del reto, ya que, una vez lo consigamos, obtendremos recompensas para el juego. Por ejemplo, si hacemos una foto y aparece un Yo-kai legendario, se nos recompensará con un orbe legendario que nos dará 20.000 puntos de experiencia a un Yo-kai de nuestro equipo. Guay, ¿verdad?
En cuanto a modos de juego, el juego no cuenta con modo on-line, lo cual es una verdadera oportunidad perdida dados los tiempos que corren, pero sí tiene un modo multijugador local en el que podremos combatir con amigos. El título también cuenta con funcionalidades para Streetpass, Spotpass y el podómetro de la consola, con las que podremos conseguir objetos, monedas y desbloquear Yo-kai, en nuestro Medálium, de las personas con las que nos encontremos.
El podómetro de la consola servirá para poder comprar monedas de juego con el fin de usarlas en la máquina expendedora de gashapones del Monte Arboleda, donde, tras encontrar a Whisper, podremos ir a probar suerte -con un máximo de 3 veces al día- para conseguir Yo-kai raros (rango alto, especiales, legendarios…), objetos y más.
Vamos con las conclusiones…
La razón del éxito de este nuevo JRPG no es casualidad, y la esencia propia de su creadora tiene parte fundamental del mérito. Una esencia que ya les ha funcionado muy bien en otros títulos como los de la saga de Inazuma Eleven, donde encontramos algunos elementos comunes: un mundo clásico de anime que explorar libremente con un acabado toon-shading de colores vivos y muchos detalles; además de otros de herencia de la franquicia Profesor Layton, como son las cinemáticas verdaderamente muy conseguidas.
A esto se le añade una genial puesta en escena para los combates -que se sitúan bastante innovadores en este género de los RPG-, una enorme cantidad de conversaciones con NPCs que nos permitirán desenvolvernos en el mundo de Yo-kai Watch, y todo ello siguiendo una trama que, a pesar de su aspecto infantil -a primera vista-, nos consigue enganchar hasta el final, sobre todo por sus carismáticos personajes.
Me es imposible dejar pasar una pegadiza banda sonora, una impecable localización al castellano, y un apartado gráfico excelente que destaca por los excelentes resultados que saltan a primera vista (estética, animaciones, efectos…), y que además se pueden disfrutar en un completo 3D.
Sin duda, la calidad Level-5 deja huella en cada uno de sus títulos y Yo-kai Watch no es para menos. Debes jugarlo.
Coleccionismo, diversión, humor, combates, fusiones, decenas de horas de juego y Level-5 como desarrolladora. ¿Qué más se puede pedir?El Análisis de Yo-kai Watch en Números
Historia - 89%
Gráficos y Efectos visuales - 95%
Jugabilidad - 90%
Banda Sonora y Efectos de sonido - 92%
92%
¡Juegazo!